Definición y ejemplo de contratos de futuros
Es un contrato mediante el cual dos partes se comprometen a comprar y vender un activo a un precio y fecha de vencimiento determinados. De ahí que se llame contrato de futuro en su definición.
Un ejemplo de contrato de futuros es el oro. Cuando inviertes en futuros de oro estás comprando un título que te van a pagar un precio determinado a su fecha de vencimiento. En realidad no estás comprando el oro físico, estás utilizando un derivado financiero. El precio está basado en el precio de un activo subyacente, en este caso el oro físico. Al vencimiento, si el precio es mayor al que has pagado, obtendrías tus beneficios, pero si es menor, reportarías pérdidas.
Ahora que ya sabes cómo funciona los contratos de futuros podrás decidir si este tipo de derivado financiero es o no en lo que quieres invertir.
¿Cómo operar futuros?
En su origen, los contratos de futuros se idearon para materias primas mediante los cuales, los productores se garantizan o mantienen un precio estable durante el proceso de producción.
En la actualidad se utilizan por inversores de forma especulativa y es posible hacerlo a través de un broker. Dada la accesibilidad a infinidad de productos financieros por el gran público, muchos brokers ofrecen poder operar futuros a mano de un click.
Si lo que estás buscando es dónde operar contratos de futuros, abajo encontrarás una selección de brokers. Todos los brokers disponen de sus licencias pertinentes para garantizar la seguridad de tus fondos.